Hoy tenemos un menú especial, en el que compartiremos mesa con Vicents (mi tío segundo y webmaster de El divino paciente) , descubriremos las posibilidades que nos brinda adaptar objetivos antiguos a una cámara micro cuatro tercios y saldremos de paseo para probar este objetivo “nuevo” además de sacarle el polvo a una vieja Box Tengor. |
¡Lavaros bien las manos y sentaros a la mesa!
nota previa: aunque la historia viene narrada por mi, los diálogos de Vicents han sido escritos por él mismo.
Ya andaba unos meses con la idea de comprar un objetivo analógico luminoso y adaptarlo a mi Lumix G1, con la finalidad de obtener esos enfoques selectivos que tanto me atraen y que poco podía lograr con el objetivo del kit de mi cámara, debido a su abertura y al tamaño del sensor m4/3, cuando Vicents me comentó que su mujer había tenido una Pentax Me Super -desafortunadamente ya rota- pero de la cual aún conservaba el objetivo. ¡Qué suerte que Vicents lo guarde todo!
Carmen y Vicents nos invitaron a mi padre y a mí a subir a Palagrufell para pasar un par de días con ellos, y la fortuna había querido que ese mismo día recibiera el adaptador necesario que había comprado por eBay para poder conectar el objetivo de Pentax-K a mi cámara.
Llegamos sin problema y Vicents me dio el objetivo:
Vicents: - Chaval, un 50mm (que con el sensor de tu cámara de 2x se convierte en un 100mm) de abertura f 1.7 ¡Las cámaras de hoy en día ya no vienen con un objetivo así!
Enroscar en el adaptador, enroscar en la cámara y en el menú de ésta seleccionar “Disparar sin lente”, pues como entre el objetivo y la cámara no hay conexión electrónica, si no seleccionamos esta opción la cámara nos avisará de que no detecta la lente y no funcionará. El objetivo es manual, tendremos que seleccionar la abertura y la distancia de enfoque mediante los aros del mismo, si bien podemos poner la cámara en modo A (prioridad de abertura) para que ésta elija la velocidad adecuada para exponer correctamente la toma. Para enfocar, nada mejor que el visor electrónico de la Lumix G1, ¡en el que se puedes ver un recorte a resolución 1:1 para enfocar con precisión! El adaptador que compré, aun siendo el más barato, da muy buen resultado aunque si colocas la distancia de enfoque a infinito no enfoca realmente al infinito -es necesario girarlo un poquito- pero según he leído es un mal del cual padecen la mayoría de estos adaptadores.
He subido diversas fotografías de ejemplo tomadas con este objetivo, como la que viene a continuación, en el set Wood/Beach/BW, en mi galería de flickr.
V: - Bueno ahora ya tienes un tele corto de 100 mm y te va a ir muy bien para realizar retratos con luz natural dada su abertura, además se puede utilizar para realizar tomas de cerca (primeros planos) ya que la distancia mínima de enfoque sigue siendo de 45 mm.
Mientras hacíamos pruebas con el objetivo, a la luz natural que tanto gusta a Vicents, no pude evitar fijar mi vista en unas cámaras, una de ellas en forma de caja, colocadas en una repisa del comedor.
Bernat: - ¿Y esta cámara?
V: - Es una antigua cámara para formato de película 120 y la que hay al lado de baquelita que perteneció a mi padre, también utiliza película de formato 120.
B: - ¿Y funciona?
V: - La de baquelita seguro, la otra es probable pero tendríamos que limpiar el objetivo, lleva acumulando polvo muchos años.
Y funcionaba. Al deslizar la pequeña palanca de un lado hacia el otro, el obturador se abre y se cierra. Ídem al volver al lado original. Ahora sólo faltaba carrete. La suerte quiso, de nuevo, que en mi mochila llevara mi Holga 120 y que, como le tenía que poner aún el carrete, tuviera uno de 120 para estrenar. Dicho y hecho, antes de empezar a comer (ver la fotografía del inicio del post) ya colocamos el carrete dentro de la cámara, y esperó pacientemente encima de la mesa. Después de 90 años, ¡no creo que le molestara esperar unas horas más!
V: - Después de hacer una búsqueda internet, el nombre de completo de esta cámara es Zeiss Ikon Box-Tengor 54/2, fabricadas entre el 1926-28, con una apertura de f11. Hace fotografías panorámicas, y a través de sus dos espejos -uno en la parte superior y el otro en un lateral- permite encuadrar la fotografía.
Esto significa que en un carrete de 120 se pueden hacer un total de 8 enormes panorámicas. Debido a haber utilizado una película de 400ASA (una sensibilidad inexistente en la época de esta cámara) el carrete, al revelarlo, resultó estar algo sobre expuesto. Las manchas rojas son debidas a que la cámara no debe cerrar del todo, y a la luz entrante por la ranura roja dónde se lee el numero de fotografías hechas, escrito en la parte trasera del carrete.
Os dejo con 4 ejemplos, de ese día, de fotografías hechas con la Box-Tendor:
1 comentario :
Sobrino, aqui tienes mi pequeña contribución: http://eldivinopaciente.blogspot.com/?zx=f01a1a9c1de2f28f
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